La organización trabaja en la transición de vehículos de gasolina a eléctricos.
En el municipio de Umán, Yucatán, un grupo de mujeres organizadas lidera un proyecto de transición energética a la par que empodera a aquellas que han decidido ofrecer un servicio de transporte público que hasta hace muy poco dominaban los hombres.
Ellas son las Guerreras Fénix de Umán y son mujeres mototaxistas que desde hace dos años se establecieron como una organización formal que trabaja en la conversión de motocicletas de gasolina a vehículos 100 por ciento eléctricos.
“Los líderes y autoridades piensan que una mujer no tiene idea de lo que es el transporte, pero nosotras hemos avanzado a pasos agigantados, hay líderes mototaxistas de más de 30 años que no han logrado organizarse y nosotras ya somos 40. Yo llevo de mototaxista 10 años, estuve en otras organizaciones y me di cuenta de que el transporte en mototaxi no ha avanzado porque hay muchos liderazgos cerrados, entonces decidí platicar con las primeras compañeras y así iniciamos, primero tres, luego 12 y así hemos ido avanzando.
“Hemos sido bendecidas porque la ciudadanía ha recibido muy bien nuestro servicio, les ha encantado por la seguridad de la unidad o del trato que se le da al pasaje. Hemos tenido muy buena respuesta”, comparte Verónica Ocaña, fundadora de Guerreras Fénix Umám.
La organización forma parte de la lucha contra el cambio climático gracias a que la Universidad Modelo de Mérida les ayudó a probar un prototipo de vehículo con un motor eléctrico dentro una unidad ya existente. La colaboración les permitió realizar las pruebas para verificar la viabilidad de implementar este sistema en toda su flotilla.
El trabajo de las mujeres llegó hasta los ojos de la ONU y a través del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), implementado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) se les otorgó un lugar en el Programa de Pequeñas Donaciones (PPD) con lo que lograron tener su primer vehículo 100 por ciento eléctrico.
“Me siento muy orgullosa, las compañeras también, no pensé que realmente una organización como la ONU volteara a ver este grupito de mujeres y que tomaron en cuenta muchas ideas que tenemos, a pesar de que no tenemos los estudios, pero sí tenemos muchas ideas y ellos nos ayudaron a concretar la primera y todo es para ayudar al medioambiente, que es una de las labores que más hacemos nosotras”.
Ahora, la meta es conseguir los recursos, financiamientos o créditos para convertir todas las unidades que actualmente usan gasolina en vehículos eléctricos.
“La solución no es comprar unidades que ya sean así eléctricas sino hacer la conversión porque nada más en Umán somos más de 5 mil mototaxistas. A nosotros nos gustaría reutilizar nuestras unidades, que ya tenemos y que ya acabamos de pagar. La unidad es viable al 100 por ciento, esta transición es viable porque nos da un rendimiento de más de 12 horas una sola unidad”, detalla.
Las Guerreras Fénix de Umán siguen tocando puertas con empresarios, autoridades y otras organizaciones no gubernamentales para conseguir los recursos que les ayuden a cumplir su sueño.
Mientras tanto, se dedican a brindar un servicio que les ayuda a contribuir en el ingreso familiar al mismo tiempo que impulsan a otras mujeres.
“Ver que a partir de nuestra organización otras mujeres se animaron a ser mototaxistas, aunque estén en organizaciones que lideran hombres, es de lo que más me siento orgullosa porque como mujer sales adelante, como madre demuestras muchas cosas sin descuidar el hogar ni a tus hijos y en lo personal creo que tú puedes alcanzar todas las metas que tengas y los sueños que tengas, se puede lograr, no importa la edad porque hay de diferentes edades de aquí en el mototaxi”.
Su comentario