Prevén un mayor prejuicio en 2024 por el alza de incendios la temporada pasada.
En el marco de la reunión interinstitucional de autoridades federales y estatales para atender temas de cambio climático, la titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambio Climático y Energía (Semabicce), Angélica Lara Pérez Ríos, afirmó que Campeche ha perdido 23 mil hectáreas anuales en los últimos tres años, y este año con los incendios forestales que aumentaron, probablemente los daños serán mayores.
Destacó que los principales factores de deforestación en el estado son los cambios de uso de suelo irregulares para ampliación de campos de cultivo, los incendios forestales, la tala ilegal, y el cambio climático que no abona a la restauración de las cadenas ecológicas pues los cambios bruscos de temperatura, aunados a las lluvias atípicas, generan desequilibrios ambientales.
Recordó al corredor ecológico Balam Beh como uno de los proyectos ecológicos de mayor envergadura en el estado para mitigar la deforestación, pues abarcará un territorio desde la Reserva de la Biosfera de Calakmul hasta el municipio de Carmen, pasando por los municipios de Champotón y Escárcega, pues hay posibilidades de aumentar incluso la genética y presencia de ejemplares de jaguar.
Sin embargo, inexplicablemente, desde el anuncio de este proyecto a finales del año pasado, no hay mayores avances ni se tiene claro cuáles serán las primeras acciones; Pérez Ríos explicó cuál es la estrategia a implementar y se limitó a hablar de la reunión que sostendrían con autoridades federales de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Los datos duros sí los dio, municipios como Calakmul, Hopelchén, Champotón, Escárcega y Candelaria, son los más afectados por temas de incendios forestales y tala ilegal de maderas duras como chacah, ramón, granadillo, cedro y caoba rojas, entre otros, maderas que se explotan en algunos municipios pero de manera artesanal y responsable.
Previo a dicha reunión, también se intentó entrevistar a Oscar Uriel Romero, delegado de la Semarnat en Campeche, quien al respecto a los reportes del impacto que ha tenido el Tren Maya hacia ejidatarios con terrenos a lo largo de las vías, y que denuncian daños como inundaciones, erosión y pérdida de árboles frutales en sus parcelas debido al sascab suelto, prefirió negarse a hablar y argumentó: “No puedo hablar en contra de los proyectos federales, discúlpame”.
Su comentario