Un juez estadunidense canceló una audiencia programa para el martes sobre si imponer una prohibición más duradera a las deportaciones de venezolanos del presidente, Donald Trump, bajo una ley de 1798, citando la decisión de la Corte Suprema que anuló su prohibición temporal de tales expulsiones.
La Suprema accedió el lunes por la noche a la solicitud del gobierno de anular el fallo del 15 de marzo del juez, James Boasberg, con sede en Washington, que bloqueó de forma temporal las deportaciones bajo la invocación de Trump de la Ley de Enemigos Extranjeros mientras continúa el litigio en el caso.
Al poner fin a las órdenes de restricción temporal de Boasberg que prohibían esas deportaciones -emitidas el 15 de marzo y el 28 de marzo y que duraron dos semanas cada una-, la Suprema dijo que los detenidos deberían haber impugnado sus deportaciones en Texas, donde estaban confinados, en lugar de en Washington.
En una breve orden escrita el martes, Boasberg pidió a los abogados de los inmigrantes venezolanos detenidos que le comuniquen antes del 16 de abril si tienen intención de seguir adelante con su petición de una orden preliminar más duradera.
Los abogados de la Unión Americana de Libertades Civiles, que representan a los inmigrantes, no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios.
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