Aseguran que el gasto asciende entre mil 500 y 2 mil pesos por familia.
Hasta los comerciantes se están quejando de lo caro que significa poner un altar en estas fechas, pues aseguraron que el gasto asciende entre mil 500 y 2 mil pesos por familia, en caso de querer preparar un pibipollo para seis personas y esperar visitas, así como colocar dulces, frutas, conservas y demás, en el altar alusivo a las y los fieles difuntos. Sin embargo, aun con los diversos costos en los supermercados y el Mercado Tradicional Pedro Sainz, los campechanos continúan siendo fieles a estas costumbres.
Y es que año con año, la inflación ajusta los precios de diversos productos que generalmente se traen de otras entidades para comercializarse en el estado, por ello, insumos como el tomate, cebolla, ajo y chile habanero presentan un determinado precio días previos al Día de Muertos, y durante del 31 de octubre al 2 de noviembre -por lo general-aumentan.
Es así que el costo del tomate, cebolla, ajo, epazote, cilantro y demás, tuvieron un ajuste de al menos 20 por ciento con respecto a los días anteriores. Mientras que la hoja de plátano, masa, xpelon, y demás ingredientes como las carnes de pollo, gallina y cerdo, se ajustaron 20 por ciento con respecto al año pasado.
Si un campechano quiere experimentar un pibipollo especial o exótico, poniéndole carne de res -arrachera- o mariscos -camarón y pulpo- el costo se incrementa de 20 a 30 por ciento, pues el precipo de estos productos es aún mayor; aunque sí hay gente ofertándolo en redes sociales como algo novedoso.
Sin embargo, los mercados periféricos y el principal centro de abastos de la ciudad, así como los supermercados, han mantenido flujo constante de marchantes y consumidores, buscando los mejores precios, productos frescos o, en su caso, los más convenientes para poder ahorrarse unos pesos, pues hay quienes tienen la tradición de abrir fosas en sus patios para hacerlos enterrados.
A todo esto se le suma la compra de los dulces típicos como el mazapán, cocadas, de frutas como papaya, nance, cocoyol y ciricote, y quienes consideren comprar algún licor para su difunto, entre otros.
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