Un pedazo de la historia yucateca ha regresado: la emblemática Sidra Pino vuelve al mercado tras años de ausencia, y ahora, los vallisoletanos y visitantes podrán disfrutarla en el Restaurante Velut, ubicado en el Hotel & Suites Country, en el corazón del pueblo mágico de Valladolid.
Un legado con más de un siglo de historia, la Sidra Pino fue fundada en 1888 por José María Pino Rusconi, un capitán de barco apasionado por las bebidas naturales, quien decidió crear su propia refresquera con sabores únicos. Su popularidad creció hasta convertirse en una de las marcas más queridas de la península de Yucatán, rivalizando con gigantes del sector. A lo largo del siglo XX, su característico sabor y su arraigo en la cultura local la convirtieron en un símbolo de identidad para los yucatecos.
A lo largo de su historia, la empresa enfrentó grandes cambios: en 1935, se convirtió en distribuidora de Coca-Cola, y en 1965, tras ser adquirida por un empresario de origen libanés, su imagen fue renovada con un logotipo que evocaba la bandera de Líbano. Sin embargo, la fuerte competencia con marcas globales llevó a su declive en los años 90, culminando en su cierre en 2011 tras un conflicto laboral.
Después de más de una década de ausencia, en 2025, una empresa yucateca ha retomado la producción de Sidra Pino, devolviendo a los yucatecos el placer de disfrutar de una de las bebidas más icónicas de la región.
En su compromiso por ofrecer experiencias gastronómicas auténticas y de calidad, el restaurante Velut se convierte en uno de los primeros puntos de venta de Sidra Pino en Valladolid. Ubicado dentro del Hotel & Suites Country, en la calle 42 x 33 y 35, colonia centro, este espacio se distingue por su ambiente acogedor, su cocina de excelencia y su apuesta por productos locales con historia.
La reintroducción de Sidra Pino marca un hito en la historia de la gastronomía yucateca, uniendo el pasado con el presente en cada sorbo. El restaurante Velut invita a locales y turistas a descubrir o reencontrarse con esta refrescante bebida y a ser parte del renacer de una tradición.
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